Esa promesa la he mantenido y evolucionado con las decenas de cursos que he creado y lanzado desde entonces.
No te voy a mentir, la formación online es una de las fuentes que más ingresos le genera a mis empresas, pero estoy cansada de ver en las métricas de cada mes que crecemos en número de alumnos, pero no en alumnos que finalizan las formaciones.
Así que comencé a pensar... ¿Cómo podría motivar a mis alumnos para que terminaran sus formaciones?
Estaba claro que con mis cursos actuales de 8-12 horas iba a ser muy difícil, así que se me ocurrió diseñar una metodología basándome en cómo he ido entrenando a mi equipo.
Sabía que al agregar tareas al final de cada módulo conseguiría que el porcentaje de cursos finalizados subiría y, por eso, decidí crear una nueva metodología 100% práctica y accionable.